Viaje a la graciosa

Excursión de un día a la graciosa

La Graciosa es la más pequeña de las Islas Canarias, y para muchos la gran desconocida: 29 km cuadrados de Reserva Marina del Parque Natural y 750 habitantes viviendo en ella. A finales de junio se cumplirá un año desde que fue reconocida oficialmente como la octava isla habitada del archipiélago canario, y desde entonces no ha dejado de aparecer en los medios de comunicación.
Algunos se dieron cuenta entonces, otros la conocen por las visitas que hacen al Mirador del Río cuando vienen a Lanzarote, ya que las vistas desde allí son las mejores, y los que ya la conocen, vienen a aprovechar con una excursión de un día para conocerla más.
Para los primerizos, para los que nunca han estado, tres consejos básicos; lo primero que deben saber para viajar a La Graciosa es que no hay aeropuerto, el acceso a La Graciosa es en ferry desde Lanzarote, concretamente desde Orzola. Dos; no hay hoteles, están las casas tradicionales de allí que se alquilan. Y tres; no hay asfalto, la forma de moverse es en bicicleta, a pie o en taxis-jeeps autorizados.

Ruta de los delfines en la isla de lobos

Tras recogerle en su hotel, tomaremos un autobús hacia el norte de Lanzarote, y a las 11 de la mañana nos embarcaremos en el puerto de Órzola en un ferry hacia La Graciosa, la isla habitada más pequeña del archipiélago.
Después de visitar Caleta de Sebo volveremos al puerto para subir a bordo de un catamarán con el que exploraremos la costa sur de La Graciosa. Una vez a bordo, disfrutaremos de un mojito y de la típica tortilla española, antes de fondear en la Playa Francesa, una de las más bellas de la isla. Sus aguas turquesas y su arena dorada hacen de esta playa un auténtico paraíso natural.
A continuación, tendrá tiempo libre en esta playa para tomar el sol, refrescarse con un baño o probar el snorkel o el kayak. A continuación, sobre las 14:00 horas, recuperaremos la energía con un almuerzo a bordo del barco. El menú se compone de paella y fruta fresca y también tendremos barra libre con cerveza, sangría, refrescos y agua.

Espectáculos en lanzarote

Ya ha pasado la Semana Santa y ahora empezamos a planificar las vacaciones de verano. ¿Eres de los que dejan para última hora la elección del destino y del alojamiento? Si estás planeando unas vacaciones diferentes y sin estrés, te recomendamos que La Graciosa es la opción perfecta, pero debes empezar a planificar el viaje desde ya.
Aunque las Islas Canarias reciben visitantes durante todo el año debido a su agradable clima, es lógico que la mayor afluencia de visitantes a las islas se produzca en verano. La Graciosa no es diferente, y de junio a septiembre llegan barcos llenos de turistas con la intención de pasar unas horas o días en la isla.
Si sólo quiere venir a pasar el día, no tendrá ningún problema. Si no está en un barco, estará en el siguiente, pero tendrá que estar atento a los horarios de vuelta a Lanzarote. Si tus planes son conocer La Graciosa un poco más a fondo tendrás que reservar alojamiento, ya sea un camping o un apartamento en La Graciosa.

Montaña de fuego lanzarote

Después de la recogida le llevaremos a Orzola donde embarcaremos en el barco que nos llevará a la isla de La Graciosa. En el barco se puede admirar la escarpada costa de Lanzarote. Entrando en La Graciosa podrá disfrutar del pueblo de Caleta de Sebo, donde la espectacular iglesia del pueblo merece una visita. Embarcamos en el moderno Catamarán, que nos llevará a una hermosa playa donde fondeamos. El almuerzo se sirve a bordo. Después podrá nadar o realizar otros deportes acuáticos, o simplemente disfrutar del sol…
La isla de La Graciosa forma parte del archipiélago Chinijo, perteneciente a las Islas Canarias y dentro de la provincia de Las Palmas. La Graciosa tiene una superficie de 29 kilómetros cuadrados y está formada por dos pequeñas poblaciones: La Caleta del Sebo y Casas de Pedro Barba. Es la menos poblada de las 8 islas habitadas y cuenta con una población aproximada de 721 habitantes.
En el puerto de Caleta de Sebo embarcamos en un hermoso y moderno catamarán para navegar por la costa del archipiélago Chinijo. Durante la agradable travesía disfrutamos de un ambiente chill-out, donde se puede tomar el sol en la cubierta mientras se disfruta de una bebida refrescante y se fotografía la costa por la que navegamos.